Un bello recuerdo me asalta
en mitad del fragor de la noche oscura:
somos tú y yo,
paseando bajo el mismo paragûas
mientras charlamos de mil cosas,
dejando tras de nosotros
una estela de risas y bromas
puente abajo, caminando y parándonos a cada rato
para mejor entendernos.
Pasa el tiempo.
Ya no puedo pasear por esos lugares
porque me resultan extraños cuando tú no estás
,ni puedo escuchar tus palabras cercanas
,las mismas que me hacen recordar
que estás en alguna parte
,sin sentir que fueron y siempre serán
esos momentos y no otros
,los que me hacen sentir feliz.
Ahora que ya sabes que sé dónde estás
solo me falta que tú sepas dónde estoy yo
.Pero aún no he descubierto la forma de rogarte
que no olvides jamás
ninguno de esos momentos del pasado
para que logres la respuesta
que no buscas por temor.
Mientras espero alguna señal de humo
que me indique que libraste con éxito tu última batalla
,yo agito mi pañuelo contra el viento del norte
que barre la superficie del agua
bajo el puente aquel
e intento meterme en tus sueños
para que puedas verme;
ya te veo a través de los ojos de mi imaginación
caminando por las mismas calles,
llenando el paisaje con tu figura
y acaso, con otras que te acompañan.
en mitad del fragor de la noche oscura:
somos tú y yo,
paseando bajo el mismo paragûas
mientras charlamos de mil cosas,
dejando tras de nosotros
una estela de risas y bromas
puente abajo, caminando y parándonos a cada rato
para mejor entendernos.
Pasa el tiempo.
Ya no puedo pasear por esos lugares
porque me resultan extraños cuando tú no estás
,ni puedo escuchar tus palabras cercanas
,las mismas que me hacen recordar
que estás en alguna parte
,sin sentir que fueron y siempre serán
esos momentos y no otros
,los que me hacen sentir feliz.
Ahora que ya sabes que sé dónde estás
solo me falta que tú sepas dónde estoy yo
.Pero aún no he descubierto la forma de rogarte
que no olvides jamás
ninguno de esos momentos del pasado
para que logres la respuesta
que no buscas por temor.
Mientras espero alguna señal de humo
que me indique que libraste con éxito tu última batalla
,yo agito mi pañuelo contra el viento del norte
que barre la superficie del agua
bajo el puente aquel
e intento meterme en tus sueños
para que puedas verme;
ya te veo a través de los ojos de mi imaginación
caminando por las mismas calles,
llenando el paisaje con tu figura
y acaso, con otras que te acompañan.
Hubo un tiempo en que el destino
nos reunía en lugares insospechados
y los tomaba como una señal.
Ahora creo que solo fueron
el preludio de los días de espaciada ausencia
que se impondrían entre nosotros.
Pero no me doy por vencida.
Mañana bien pudieras leerme el pensamiento
-desde esa distancia inexistente entre dos personas que se recuerdan-,
y podamos celebrar la vida,
un año más."
nos reunía en lugares insospechados
y los tomaba como una señal.
Ahora creo que solo fueron
el preludio de los días de espaciada ausencia
que se impondrían entre nosotros.
Pero no me doy por vencida.
Mañana bien pudieras leerme el pensamiento
-desde esa distancia inexistente entre dos personas que se recuerdan-,
y podamos celebrar la vida,
un año más."
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